A rúa en chamas/La calle en llamas
porAntonio Polo
A rúa en chamas
“Había elocuencia e había nervio”.
Víctor Hugues. “O século das luces”
ALEJO CARPENTIER
A soberbia tiña embaixada naquela casa.
Á tardiña chegaban os pasquíns cheirando a tinta fresca.
As consignas, as bandeiras, o ouropel dos discursos
tiñan no soto acumuladas tres revoluciones.
A ourivaría das palabras empapelaban as paredes,
a rotundidade dos argumentos era disuasión, pomada
ante a alegoría dos semáforos sempre en ámbar.
Hoxe votamos si á mañá pero absterémonos
á tardiña para negar en todo caso as noites.
Había elocuencia e había nervio ante a arenga.
A trigonometría era xogar cos cervos ao pechar un trato,
o loureiro ou o xarope servían para pagar un pacto,
a unción das mans era póliza de candidato,
a expectación primeira, a malversación despois.
La calle en llamas
“Había elocuencia e había nervio”.
Víctor Hugues. “O século das luces”
ALEJO CARPENTIER
La soberbia tenía embajada en aquella casa.
Al atardecer llegaban los pasquines oliendo a tinta fresca.
Las consignas, las banderas, el oropel de los discursos
tenían en el sótano acumuladas tres revoluciones.
La orfebrería de las palabras empapelaban las paredes,
la rotundidad de los argumentos era disuasión, pomada
ante la alegoría de los semáforos siempre en ámbar.
Hoy votamos sí a la mañana pero nos abstendremos
al atardecer para negar en todo caso las noches.
Había elocuencia y había nervio ante la arenga.
La trigonometría era jugar con los ciervos al cerrar un trato,
el laurel o el sirope servían para pagar un pacto,
la unción de las manos era póliza de candidato,
la expectación primera, la malversación después.
|